19 jun 2016

LAS TRES DESPEDIDAS

Tuve con mi Padre tres despedidas.
Nuestra relación fue intermitente en el tiempo palpable, en el tiempo del reloj, de los días, pero fuerte, amorosa y eterna en el corazón. En el corazón jamás hubo distancia, si hubo dolor, pero el amor a final de cuentas lo cura todo y por supuesto que el amor gana cuando se trata de quien te dio la mitad de la vida, cuando estás conformada un cincuenta por ciento por esa persona. Por eso y mucho más él vive en mi.
Nunca he olvidado, aquel día en el aeropuerto de León, Guanajuato. Íbamos mi papá, mi hermano, mi mamá y yo, fue en mi memoria de niña de 8 años en 1992. Según eran vacaciones a Tijuana, pero todos sabíamos que ya no íbamos a regresar a Lagos. Yo sabía que ya no íbamos a vivir con mi papá, me despedí de mis amigos, de mi escuela, de mi casa, ya no volveríamos, y tampoco volveríamos a ser una familia completa. Así que mientras mi hermano, mi mamá y yo nos adentrábamos a la sala de espera para tomar el avión rumbo a Tijuana, mi papá se quedaba ahí, en mi memoria siempre está ese momento en que él y yo nos quedamos viendo a los ojos, mientras ya nos separaba una pared de vidrio y a los dos se nos llenaron los ojos de lágrimas, sabíamos que era un final. Esa fue la primera despedida.
Aquel diciembre del 2006 tampoco lo olvidaré, mi papá vino a pasar ese mes a Tijuana y todo fue diferente. Se la pasó en familia, ayudó a mi hermano en su nueva casa, conoció a sus nietos, pasó tiempo con mi abuela, yo pasé tiempo con él, mi hermano estuvo en Navidad a su lado, yo en año nuevo. Volví a tener a mi papito. Un día antes de regresar a Guadalajara, mi hermano y yo fuimos a verte, frente a la casa de mi abuela te di un abrazo, no olvidaré ese abrazo, fue el último, si lo hubiera sabido jamás te hubiera soltado. Pero no lo supe. Esa fue la segunda despedida. 
Yo no creía que estuvieras enfermo, mucho menos tan grave. Fuimos a Cuernavaca a verte pero yo iba con toda la intención de cuidarte, de dejar mi vida por un tiempo y cuidarte. Todavía cuando entré al hospital y te vi, inconsciente, todavía creí que te ibas a recuperar. Fue impactante verte así, con la barba crecida, con tus brazos maltratados de tanta inyección, como dormido. Siempre fuiste tan fuerte, tan guapo, tan imponente, verte tan vulnerable me partió en corazón. No sabía qué hacer, solo tomé tu mano y te dije "papito te quiero mucho". Yo sé que tú nos sentiste, yo sé en mi alma que nos estabas esperando, porque a las horas te fuiste. Esa fue nuestra tercera y última despedida.
Pero desde entonces, aunque suene trillado, aunque suene imposible, loco, inverosímil, siempre estás conmigo, me cuidas. No sé qué pasó después de tu muerte, a dónde fuiste, solo sé que siempre puedes protegerme, me lo has demostrado, lo he sentido. 
Me hiciste mucha falta siempre, hoy te extraño como muchos días de mi vida, pero creo firmemente lo que una vez me dijo una señora que leía el café "tu papá te va a dar ahora, todo lo que no te dio en vida" . Feliz día del padre, papito. Te amo siempre. 

27 abr 2015

CRECER


    

A veces siento que he dejado de ser yo, de disfrutar las pequeñas cosas que antes me llenaban de felicidad, me mantenían idealista, con fe. Ahora que soy adulta me he vuelto cínica y perezosa, mas atea y escéptica que nunca. Tengo la vida que siempre temí, un trabajo, una rutina, cuentas que pagar, miedo a arriesgarme, tengo años preguntándome dónde quedó esa Martha tan llena de sueños, tan entusiasta, que creía tanto en ella, con tantas expectativas.
Si bien el mundo "adulto" no es lo mismo que cuando eres pequeño y los sueños alimentan el alma, ahora necesito dinero para sobrevivir y por ende un trabajo. Cuando te das cuenta ya estas enrolada en ese mundo adulto y ya dejaste a un lado todas las cosas que te apasionaban por el estres, por el cansancio, porque aprendiste que de sueños no se vive y que algunos si son imposibles.
Te das de golpe cuando descubres que no eres tan talentosa como creias, que hay muchísima competencia, que hay muchos que escriben, y muchos lo hacen mejor que tu. O que nunca tuviste ese talento para cantar, ya que cruelmente tus amigos, familiares y gente cercana sea encargó de mentirte y decirte que cantabas maravilloso y además te pedían lo hicieras (el ridículo) en reuniones, luego creces y dices bueno canto muy feo y desistes de esa idea de ser mega famosa y cantar por el mundo, ahora solo me conformo con cantar en mi casa, en la regadera o en el carro, donde nadie me escuche pero donde yo pueda descargar eso que tanto me gusta hacer.
Quisiera perder el miedo, el miedo a arriesgarte y a fracasar es terrible. Todos hablan de eso de arriesgarte, vivir la vida, de decretar, pero llevarlo a la practica no es fácil aunque suene mediocre.
Cuando creces, valoras más la tranquilidad, el tener un hogar, el poder pagar las cuentas sin quedarte sin un quinto, el viajar, poder dormir hasta tarde. 
De niña yo soñaba con cantar, ser famosa, viajar por el mundo llenando estadios, sentir los aplausos de la gente, tener una casa gigante con un jardín inmenso para mis perros, escribir libros, conocer al subcomandante Marcos y vivir un tiempo en la selva. 
Viajaba y me quedaba en hostales, comía lo que podía, compartía cuartos con extranjeras extrañas y apestosas, me derretían los hombres con barba y aspecto de hippies, me emborrachaba y desvelaba sin pensar en mañana, no quería tener hijos y defendía el feminismo barato, odiaba las bodas, ni pensar en tener una eso jamás, o dejar que un hombre me diera dinero, cómo?.
Ahora, sueño con tener un hijo, con una casa normal pero con un jardín para mis perritas, con tener un carro nuevo, con tener una boda pero no de esas fastuosas, solo una boda bonita, con un vestido bonito, con mi familia y amigos y con el amor de mi vida. Ahora me gustan los hombres bien vestidos y  con un futuro, cara limpia y que huelan rico. Ahora me gusta viajar bien, en hoteles cómodos y comer en restaurantes decentes, nada elegante solo comer bien. Ya no me emborracho mi desvelo tanto, me da pavor la cruda del día siguiente. Y también deje a un lado mi orgullo de mujer independiente y pido ayuda cuando lo necesito.
Creces y te das cuenta que tienes que ceder, que no es todo o blanco o negro, que hay muchos colores, muchas opciones, que el comunismo no es la utopía perfecta, ni el capitalismo es la muerte o el diablo. Que puede haber algo intermedio. Que todo tiene algo bueno y malo. 
Ahora solo quiero tener energía para arriesgarme, poner un negocio, viajar por el mundo, perder el miedo a tener ese hijo. Arriesgarme y comenzar a leer como antes lo hacia, a hacer ejercicio, comer bien, cuidar mi piel, compartir con mi familia, estar con el hombre que amo, hacer el amor con él, tomarlo de la mano, abrazarlo y recostarme en su pecho, caminar a su lado, sacar a pasear a mis perritas, trabajar para pagar una casa con patio y que estén a gusto, jugar con ellas.  Me gustaría volver a creer en Dios, o en algo, tener fe, la fe te hace fuerte y te conforta cuando lo necesitas. Por el momento me gusta creer que en algún lugar y momento me reencontrare con mi papá, con mis abuelos, con mis tíos, con mis perritas, que volveré a ver a todos esos que ya se fueron y que extraño tanto. 
Los sueños cambian con el tiempo y creo no tiene nada de malo no haber cumplido algunos, lo que importa es evolucionar, no quedarse en un lugar si no te gusta, alejarte de la gente que no te aporta nada. 
No creo haberme defraudado al no "cumplir todos esos sueños", me defraudo cuando no me arriesgo, cuando no me siento feliz y no hago nada por cambiar mi realidad, cuando hago cosas que van en contra de lo que creo. 
Tal vez no sea la cantante o escritora famosa, pero puedo escribir lo que siento y cantar en mi casa. Sentirme tranquila. Tengo una familia, mis perritas hermosas, el recuerdo de los que se fueron y encontré el amor, si, ese amor que todos buscan incansablemente, ese del que grandes poetas y escritores han hablado, o el que se escucha en las canciones, incluso del que hablan en los cuentos, ese amor que te sacude el alma. Y cuando digo: "eres el amor de mi vida" me responden lo mismo, qué más puedo pedir?. 





23 abr 2014

PAOLA ERNESTINA



Paola. Mi Paola  Ernestina.
Recuerdo perfectamente el día en que naciste en el jardín de la casa de mi Nana. De toda la camada eras la más gordita y greñuda, cuando tú y tus hermanos pudieron comer croquetas tú eras la última en terminar, eras tan comelona que cuando todos se llenaban tu seguías comiendo. Todos tus hermanitos se fueron con otras familias, pero tú te quedaste y así fue como el destino hizo que comenzara nuestra historia.
Pronto creciste y tu pelaje de volvió lacio y brilloso, te pusiste más hermosa. Me acuerdo cuando me di cuenta de que Pilarica era una muy mala mamá al descubrir que en las noches de frío o lluvia no te dejaba entrar a la casita hecha especialmente para ustedes y que dormías en la puerta soportando el clima. Luego, aquel día en que mi nana te regaló, yo estaba en mi casa y mi mamá nos dio la noticia, mi corazón se rompió en mil pedazos, lloré como nunca, pero volví a la vida cuando al llegar con Nana ahí estabas, en la puerta con una patita herida, te habías escapado y diste con el camino a casa, desde ese día supe, no tuve duda que teníamos que seguir juntas y mejor te llevamos con nosotros a casa. Al principio te llevaste bien con Cirila, luego sucedió lo inesperado se pelearon a muerte y desde ese dïa tuve que separarlas.
Siempre fuiste tremenda, travesura tras travesura, rompiste puertas, ventanas, ropa, zapatos, persianas, escalaste bardas, brincaste, te escabulliste por todos los rincones, peleaste con Cirila, con tu mamá, con Juliana, con cualquier perrito que encontráramos en los paseos. Te saliste a la calle tantas veces y los vecinos te salvaban de perderte. En tu juventud fuiste un dolor de cabeza, siempre temí por tu seguridad.
Pero no sólo eras traviesa, eras la perrita más inteligente que he conocido,  recuerdo como siempre te ponías boca arriba para que te rascara tu pancita, como te retorcías al dormir, como me dabas besos y te desesperabas cuando te cargaba y abrazaba, parecias decir "mamá me empalagas".
Cuántas cosas vivimos juntas mi Paolita!, desde mis 16 años hasta los 30, desde mi adolescencia hasta que me convertí en adulta, nos cambiamos tres veces de casa, viste partir a Cirila y viste llegar a Juliana y a Julieta. Llenaste de pelos mi cama, mi ropa, de olor perruno toda mi casa. Te cedí todo mi espacio para mantenerte segura. Te inventé canciones tontas, bailábamos juntas, y nunca voy a olvidar como tratabas de engañarme cuando te daba las medicinas, ni lo bello y tranquilo que era caminar a tu lado. Mi princesa, mi hermosa Paola.
Me consuela no haberte visto sufrir, y aunque mi corazón está lleno de tristeza con tu partida, y nuestra casa se siente tan vacía,  me siento en paz Paolita, porque hice todo para cuidarte, y aunque me hubiera gustado estar contigo en tus últimos momentos, cuando me despedí de ti te dije TE AMO, y pude darte un gran beso. Mi princesa, hasta el último momento cuando me acercaba a ti y ya no tenías fuerzas, me movías tu colita, eso mi bella Paola lo llevo tatuado en mi alma y en los recuerdos imborrables como una de las más grandes muestra de amor que he recibido. Gracias Paola, por ese regalo, por haber sido mi compañera, gracias Paola, mil gracias por haberme dado el honor de cuidarte y amarte.

19 mar 2014

NUESTRA INTIMIDAD


Nuestra intimidad. Muchos podrían pensar, incluso tu, que no tenemos tanto tiempo juntos y que falta mucho para forjar una verdadera intimidad, pero la que tenemos, es suficiente para mi, por lo menos por ahora.
Y me gusta, me gusta la manera en que nos quitamos la ropa, la manera en que caminas desnudo frente a mi, bañarnos juntos, dormir desnudos y esa manera en que hacemos el amor, no sólo nuestros cuerpos desnudos tan cercanos, es esa intimidad de poder estar asi, de olernos, disfrutarnos, acariciarnos, hablarnos, todo.
La forma en que poco a poco hemos quitado las barreras, en que hemos desnudado no sólo nuestros cuerpos, también nuestros defectos, esas facetas escondidas que sólo se muestran en la confianza propia de la intimidad.
Nuestra intimidad... es tan nuestra que tenemos una complicidad, somos como un secreto, que muchas veces duele, pero que a final de cuentas tiene todos los sentidos. Muy pocos nos han visto actuar como verdaderamente sentimos cuando estamos cerca, saciar esa necesidad de tocarnos, así que todo entre nosotros es muy íntimo y de ahí le saco un lado bueno a todo esto, y si las paredes que nos ven cuando estamos solos hablaran, las historias de amor épicas se quedarían muy atrás, los momentos eróticos, hasta las mismas guerras. 
No sé cuántas veces me has visto llorar, y es que la verdadera intimidad lo abarca todo. Nos hemos dicho las palabras más hermosas y las más duras también, nos hemos hecho sentir en el cielo y otras en el mismo infierno, he sentido varias veces como se me rompe el alma al verte partir, y también como sólo tú sabes juntar esos pedazos y armarla, dejarla intacta para volver a ser tuya. Me hieres y también sólo tú sabes como sanar esas heridas. Has visto como me escondo, y también has podido ver en mi, muchas cosas que yo aún no he visto, y me ayudas y me alientas. 
He aprendido a interpretar tus silencios, y tu has sabido descifrar mis palabras, mis gestos.  Sabes, lo sabes bien que detrás de los reproches y verdades que duelen, sobresale todo este amor que te tengo, puedes escuchar más allá de lo que digo, tienes esa virtud. 
Sabes lo que me dueles, pero sabes también que me haces más feliz de lo que se puede padecer, que sólo una palabra tuya basta para creer y tener esperanzas, y aferrarme a todo, y saber que debo arriesgarme porque si no me arriesgo, me quedo sin nada, sin ti.
Nuestra intimidad, ha sido testigo de planes soñadores, de culpas, de confesiones, de tantos celos.  Nuestra intimidad es testigo de como ha ido creciendo esto, esto que yo llamo el amor de mi vida, y no me arrepiento, si volviera a nacer volvería a vivirlo de nuevo, sólo cambiaría aprovechar más el tiempo juntos, darte el doble de besos, decirte el triple que te amo, abrazarte por más tiempo, no pelear tanto y reírme más contigo. 
Creo que con nadie he tenido tanta intimidad como contigo. Peleando o haciendo el amor, llorando o sonriendo. Con nadie había llorado tanto de frente, ni abierto mi corazón de par en par, aún con miedos, pero abierto totalmente, con nadie me había sentido tan a gusto desnuda, ni sin maquillaje, sin peinarme, y aún así sentirme bonita, porque así me siento contigo. 
Con nadie había tenido esa verdadera, total, absoluta intimidad de decir  TE AMO, sin pudor, sin tapujos, con miedos, pero libre, te amo, menos decir TE NECESITO, nunca, nunca, de verte a los ojos,de tocar tus manos, tu piel y sentir la vida como nunca, sentirme viva, sentirme tan pero tan vulnerable porque no puedo hacer nada más que amarte y entregartelo todo, pero también sentirme segura, muy segura cuando me respondes que también me amas.
Quiero más intimidad contigo, mucha mucha más, pero libre, sin miedo alguno, confiada.  Quiero mi futuro contigo, seguir descubriendo, seguir sintiendo, aprender, madurar. Quiero seguir teniendo tus manos para entrelazarlas con las mias, seguir durmiendome en tu pecho, seguir diciendote todo lo que te amo. 

1 ago 2013

ME GUSTA





Me gusta cuando estamos juntos y se me quita la incertidumbre de pensar todo el día que eres o puedes ser de alguien más. Me gusta cuando eres mío, solamente, sencillamente, simplemente mío.
Me gustan todos los momentos en que soy feliz contigo, son tan intensos que el sólo recuerdo me puede durar días, y es así como sobrevivo feliz....Me gusta cuando siento que confío en ti, cuando me siento totalmente entregada a ti, cuando no tengo miedo.
Me gusta cuando reímos juntos, cuando veo tu mirada tan cerca de la mía, cuando nuestra piel en verdad se funde en una sola, aunque suene tan cursi, me gusta cuando cierro los ojos y te abrazo, porque al cerrar los ojos solo veo a través de mi cuerpo que te siente tanto. Me gusta saber que contigo hago el amor como nunca lo había hecho. Me gusta besarte, me gusta tocarte, acariciarte. Me gusta dormir contigo, cuando en la madrugada me abrazas y dormimos así. Me gusta que me despiertes para hacer el amor a las 6 de la mañana. Me gusta algo tan tonto como ver la televisión contigo, comer contigo, desayunar contigo, bañarme contigo,  porque contigo cualquier pequeño detalle, cualquier acción por sencilla que sea, contigo... contigo toma mil veces otro sentido.
Me gusta cuando dices mi nombre completo, me gusta cuando dices que me quieres, me gusta quererte tanto, me gusta amarte tanto.
Amo caminar contigo de la mano.
Me gusta como me haces sentir, me gusta que me cuides, me gusta lo bonita que me siento cuando estoy contigo, me gusta sentir que contigo ni a las alturas podría tenerles miedo, porque contigo hasta mis temores se sienten distintos.
Me gusta verte entre la gente y recordar cuando eres mío.
Me gusta cuando me escribes cosas cursis, cuando te dedico canciones melosas, me gusta cuando me haces sentir tontamente romántica, como nunca había sido, me gusta descubrir todo lo que puedo ser sólo por tenerte conmigo.
Me gusta gustarte, a pesar de mis defectos, de mi rebeldía fallida, de mi sarcasmo, de mis palabras duras, me gusta, aunque suene egoísta, que seas paciente y tierno, aún cuando a veces no lo merezca tanto. Me gusta que siempre tienes las palabras correctas.
Me gustas tu, me gusta cuando hablas, cuando te portas como niño, cuando te ríes, las pocas veces que te enojas, me gusta verte cuando estas dormido, acariciar tu cara, sentirte cerca. Me gustan tus manos, tu boca, tus ojos, me gusta ese perfume que usas, pero me gusta cuando lo huelo en ti, me gusta tu elegancia, me gusta que te adaptas a todo, tus chistes tontos, que puedes platicar con cualquier persona, que eres justo, inteligente, sabio, decidido, bueno, noble, cariñoso, y me gusta que seas mío.
Me gusta como cambia el mundo cuando estás cerca.
Si pudiera explicarte cada sensación que me provocas, si pudieras entrar en mi mente, si se pudieran ver y tocar los sentimientos, si pudiera transmitirte todo lo que siento por ti, como me has enamorado, como descubro día con día la capacidad de amar que tengo, si pudieras...si pudieras sentir lo que yo siento, si el amor que tengo pudiera palparse en el aire, si pudiera expresarse en palabras, si pudiera explicarte, si lo conocieras de verdad, yo creo que nunca más perderías la fe, que creerías más en Dios, en la reencarnación, en el cielo, en el infierno, en los fantasmas, en el tarot, en el destino, en las leyendas, en los mitos, en los sextos sentidos.


DESTINO



Como un torrente inesperado de agua fría, que a segundos se convierte a tibia, luego hierve, luego explota. Te has convertido en mi más grande culpa, un encuentro totalmente inconsciente con el pasado que negué pero que traigo cargando a cuestas día con día.
Eres lo que nunca vi en la luna, abrazos largos, besos que duran segundos, los besos que son largos, desnudez, las caricias escondidas, los secretos, la complicidad de cada día.
Haces que quiera estar despierta, que quiera hacer el amor todos los días, me provocas ansiedad, necesidad, ternura, bipolaridad.
Como buena mujer apasionada que soy, por momentos no puedo moderar lo que me haces sentir, pero otras veces me obligo, con esa misma pasión a moderarme y cerrar las puertas, esconderme en el caparazón que partiste en pedacitos que he juntado, lo armo y me acurruco dentro de el, porque sé que un día te iras y lo necesitaré más que nunca.
Haces que todos los días piense sólo en el presente, pero haces también que me aterre el futuro, donde no estamos abrazados, donde cada quien camina por otro lado.
No entiendo a la vida, no comprendo para qué juntarnos, le gusta jugar con el amor de las personas.

6 mar 2012

JULIANA Y JULIETA


El 27 de octubre del 2010 una parte de mi murió, mi Cirila Enriqueta perdió la batalla contra el cáncer, esa horrible, desgastante, dolorosa y lenta batalla... Cuando ella se enfermó, me llené de miedo, un miedo que carcomía mi alma, el sólo pensar la vida sin ella me parecía totalmente sin sentido, si ella moría, yo quería morir también.... El tiempo de su enfermedad fueron los momentos más dificiles, y el tener en mis manos su vida, la decisión más terrible, me invadió el egoísmo, me invadieron las falsas esperanzas, me invadió de nuevo el miedo, hasta que el día que decidí que la durmieran, llegué a casa y ella ya se había ido.....A pesar de todo sentí tranquilidad, porque ella se fue no por decisión mía, no por eutanasia....antes de irse me despedí mil veces de ella, le dije mil veces más lo mucho que la amaba, la vi luchar por su vida, la ayudé a pasar sus últimos días con la mejor calidad de posible...nunca pensé que fuera a sobrevivir sin ella, pero el respirar y vivir mecánicamente con el paso del tiempo ayuda a calmar el dolor de esa herida que causa la muerte, como siempre lo digo, la muerte de seres tan cercanos, son una herida que jamás cierra, uno aprende a vivir con ese dolor, te acostumbras simplemente....
Pero la vida es sabia, verdaderamente sabia, y hoy después de un año lo he comprendido....
El 27 de noviembre del 2010, justo al mes de haber fallecido Cirila, apareció en mi patio Juliana Camila, un día de lluvia, se acostó a dormir en el pasto, cuando me percaté de ella la quise despertar y estaba tan débil que no podía casi sostenerse en pie, la acurruqué en la casita que era de Cirila y pasó la noche conmigo, tenía la firme intención de buscarle un buen hogar, pero realmente nunca lo hice, porque en el fondo yo creía que Cirila me la había mandado....
El 22 de septiembre del 2011, mi hermano se encontró tres bebés en la calle a punto de ser atropellados, dos machitos y una hembrita. A los niños los adoptaron rápido, pero la pequeña estaba muy enfermita, con los ganglios inflamados, costras en la boca, infección en las orejitas, creí que no se salvaría, la llevé al doctor, le dieron tratamiento, y cual fue la sorpresa la niña era muy valiente y fuerte, así que se salvó, y cuando estuvo sana para buscarle un hogar, yo ya me habia enamorado de ella.
Hoy Juliana y Julieta son compañeras de vida, parece que el destino nos juntó a las tres.... A ellas porque son casi como dos gotas de agua, son del mismo color, parecen hermanas, y a mi porque gracias a ellas veo la vida diferente, ahora la gran pérdida de Cirila la veo en ganancia, porque ella partió pero me mandó a dos hermosas niñas.
Es como comprendí que la vida es sabia, y que lo malo siempre trae algo bueno...... Julieta y Juliana son una luz, la alegría de mi vida, tienen tanta energía, tanto amor, que yo simplemente me derrito por ellas..... Sé que Cirila las cuida donde quiera que esté... Ahora debo ser fuerte para cuidarlas a ellas y a sus hermanas... pero aún no pierdo la esperanza de que algún día muy lejano, vuelva a ver a Cirila.... sé que nos volveremos a encontrar.

11 jul 2011

CUATRO AÑOS




A veces mato el tiempo recordando simplemente.




Cuatro años que parecen pocos porque la vida se va muy rápido, a veces demasiado... pero han sido tremendamente largos por el peso de tu ausencia...




Muchos días de desconsuelo, de sollozos interminables, pero también muchos otros con aires de vida que me hacen respirar, tremenda fortaleza que me hace seguir de pie y caminar, y ser como el robusto árbol que sobrevive aún cuando sus hojas se desvisten del verde esperanza para marchitarse, pero que después renacen.




Te guardo siempre en todos los pensamientos que fabrica mi mente, atrapo del pasado los más bellos momentos para conservarlos, poder hablar de ellos y que puedas seguir vivo en las palabras, en eso que soy, en lo que fui...en lo que seré gracias a ese pedazo de vida que me regalaste.




No me importa ya lo que para otros fuiste o en lo que fallaste, para mi siempre serás el que me cargaba, me llenaba de besos, me tomaba de la mano para caminar, el de mis primeros abrazos, el de mis primeros llantos, el de los recuerdos.




Cuatro años!, y así seguirá pasando la vida, así seguirán pasando los años, pero estarás siempre intacto en mi vida, sólo cierro los ojos y estamos frente al lago en ese atardecer, donde compramos café y vimos los lirios esconderse en el agua, sólo cierro los ojos y estas aquí a mi lado tomándo mi mano.




Antes sabía que estabas en alguna parte, o podía escuchar tu voz simplemente, ahora tengo la certeza de que siempre, siempre estás conmigo.....








te amo papá.












10 may 2011

VOLVER............






VOLVER

Prácticamente sin rumbo, así fue como volví a ese lugar tan importante en mi vida.
Mis recuerdos son lo más vago que puede haber en una memoria, sin embargo tenía la esperanza de que al estar ahí de nuevo, ellos, los recuerdos, se despertaran de ese sueño que duró 20 años.
20 años pasaron para regresar a Lagos de Moreno, ese hermoso pueblito ahora ciudad ubicado al norte de Jalisco, cerca de León y de Aguascalientes.
Le pedí a mi padre que me ayudara a encontrar la que fue nuestra casa. Desde pequeña fui una de esa rara especie que siempre lo cuestiona todo, pero irremediablemente sé que él está cerca de mi, explicarlo?, no podría, simplemente lo sé. Y lo comprobé.
De Guadalajara viajé a San Juan de los Lagos, cuya única atracción es la catedral de la Virgen de San Juan Su recinto es el más visitado de Latinoamérica, y es la iglesia que más limosnas recibe. Su existencia me provoca sentimientos encontrados, siento que de alguna manera se lucra con la fe de las personas, sin embargo ésta es tan fuerte que por algunos momentos me hacen creer también…
De San Juan a Lagos son sólo 40 minutos. Entrando a Lagos, algo me hizo voltear a la ventana, un impulso inexplicable, y ahí estaba, el canal y la casa de Doña Cuca, la entrada de la colonia donde estaba mi casa. Dudé que de verdad fuera aquel canalito que tenía puentes improvisados con tablas de madera, dudé por ese inexplicable impulso de voltear a la ventana y encontrarme de repente con lo que tanto buscaba… dudar, cuando a veces, o tal vez siempre sería mejor simplemente creer.
Llegue al centro de Lagos y me encontré con su enorme parroquia bellísima, la segunda más alta en Latinoamérica, por dentro tiene unos detalles hermosos, tiene un órgano antiquísimo, yo no sé por qué me gusta tanto el arte sacro, me considero una ferviente admiradora, incoherentemente porque no me gustan las religiones. Dentro de la Parroquia está San Hermión, que se supone es el cuerpo real de un soldado romano que concedía milagros.
Al ver la parroquia, las calles, el teatro, las casas de los poetas nacidos ahí, la plaza central, mis recuerdos adormecidos poco a poco volvían a la vida.
Después tomé un taxi y le pedí que me llevara a la entrada de la ciudad, por la carretera a San Juan y a León, para buscar aquel canal y la casa de Doña Cuca. Llegué y efectivamente, ahí era.
Tal y como dejé ese lugar hace 20 años, el canal tenía esos puentes improvisados, estaban los arcos, las casas de los amigos. Me reencontré con ellos, me reconocieron enseguida, platiqué de mi vida, me platicaron de la suya.
Y luego, caminé a la que fue mi casa, mi hogar. Ahora tiene una barda que cubre la entrada, de la que sin temor, y como hace 20 años, sobresalen las hojas de ese árbol de moras, la casa tiene los mismos colores, la misma estructura.
Como quise en ese momento tener una máquina del tiempo y regresarlo, y estar ahí asomada por la barda, viendo jugar a la pequeña martha, a esa niña de cabello dorado cortando las moras del árbol, jugando en los columpios de colores, ver y entrar a la casita de madera, agacharme para caber por la pequeña puerta. Regresar el tiempo, y entrar, y ver como la luz pasa por el jardín interior, tocar los muebles de madera rústica, comer huevos de codorniz, leer mis historietas, escuchar el cuento de la caracolita, ver a las tortugas de tierra tomar el sol. Entrar y ver a mi padre, sentado en la sala con su impecable uniforme de policía, verlo de nuevo, tomarle la mano, ser ahora yo como un fantasma que viajó al pasado, y abrazarlo. Ver a mi madre joven, tan bella, y decirle al oído: no tengas miedo, todo estará bien. Ver a mi hermano pequeño, disfrutando de su niñez.
Tal vez no existan nunca las máquinas del tiempo, pero mis recuerdos me llevaron de la mano por aquellos días.
Así fue como ahora, tengo un poco de fe, ahora vuelvo a creer. Hay cosas que simplemente no se pueden explicar, y tal vez esa sea una pequeña trampa de la vida, que sin duda es muy fiel con sus secretos, sabe a ciencia cierta que si nos revelara todo, quizá mucho de lo emocionante de vivirla ya no tendría tanto sentido.
Por eso ahora, yo vuelvo a creer, a creer en la magia, en el destino, en los fantasmas, sin cuestionarme, sólo sintiendo. He decidido sentir, y en lugar de dudar, mejor sonreír y ser cómplice.

10 abr 2011

SOY

Ayer descubrí que no he fallado del todo, hoy comprobé que sólo debo dejar de pensar en lo que los demás piensan de mi. Hoy, simplemente hoy soy firme madera, tronco con muchas huellas, con hojas que caen pero que renacen, con hojas que se ha llevado el aire, pero que regresa y baila con las que son jóvenes, fuertes y verdes... verdes como el color que a veces descubre el sol en mis ojos, o verdes como aquel color del que dicen, se viste siempre la esperanza. En este presente, en este segundo soy el cielo que vaga después de una tormenta, donde lo lloró todo, ahora se desviste y queda su piel azul. Soy las manos que escriben, las manos que acarian, las manos que quitan las lágrimas, las que cierran los puños para defender las palabras, las manos que se extienden para estrechar otras manos, las manos que gritan, las manos que tocan el alma. Evidencia de una vida que promete. Evidencia de los sueños. Evidencia de tropiezos, evidencia de arrastrarse, evidencia de levantarse. Soy todo, soy mar grandioso, furioso que se defiende con las olas y tormentas, pero tranquilo y hermoso con aguas turquesas que te dejan nadar.